LOS ALJIBES
.-Uno de los elementos arquitectónicos más numerosos en el paisaje del Cabo de Gata-Níjar son los aljibes, que responden a la necesidad de recoger y almacenar el agua de lluvia, que en un clima semiárido como éste, suele tener carácter torrencial. Situados estrategicamente en pasos naturales del agua como laderas o microcuencas, para facilitar la captación y conducción, los aljibes se construían en mampostería no concertada con piedras del lugar y mortero de cal. Cerrados en bóvedas de diferentes tipos y encalados al exterior, se revestían igualmente al interior en mortero de cal, siendo pintados finalmente con almagra para evitar filtraciones. Las condiciones de conservación de los aljibes son bastante buenas, debido principalmente a su sencillez constructiva y a las pequeñas obras de mantenimiento realizadas por sus propietarios, ya que la mayoría de ellos han continuado en uso.
Aljibe en las inmediaciones de la Ensenada de los Genoveses.
NORIAS
.-Por lo que se refiere a las norias, el proceso de abandono que han sufrido, debido principalmente al cambio de uso con respecto al sistema original, ha hecho que algunos de sus elementos se encuentren en la actualidad y en la mayoría de los casos, en mal estado. En ese sentido y al igual que ocurre con los aljibes, dicha circunstancia, junto con la sencillez de la concepción de tales elementos, hace que su datación cronológicamente sea especialmente difícil. Con el objeto de aprovechar el agua subterránea poco profunda, las norias se encuentran situadas en las cercanías de ramblas. Por lo general, se construía un pozo alargado con brocal sobre el que se situaba la maquinaria, para la que se empleaban maderas duras y que venía a consistir en dos grandes ruedas. La primera, de giro vertical o "rueda de agua", servía para elevar el agua del pozo mediante los "arcaduces" o cangilones de barro sujetos a ella, que vertían sobre una atarjea que conducía el agua a través de un lavadero a la balsa cercana, donde se almacenaba. A la rueda de agua le daba su giro otra rueda, esta horizontal, movida por mulos o burros. La plataforma o andel, con pequeñas rampas para que subieran los animales, es en la actualidad el elemento mejor conservado, quedando en ocasiones como ultimo testigo de la presencia de las norias.
Noria tradicional en la localidad de El Pozo de los Frailes.
MOLINOS
.-Ubicados allí donde sople el aire, ya sea en lomas o en parajes de llanuras, los molinos del cabo pertenecen a la topología clasificada como mediterránea de vela, con algunas características propias que lo singularizan, como el sentido de giro y el hecho de disponer de tres alturas y dos puertas. Consiste el molino almeriense en una edificación de planta cilíndrica en mampostería concertada de piedra del lugar con mortero de cal, encalada al exterior y al interior y conocida como torre; la cubierta, o chapitel, realizada en tablas de madera sobre costillares, es móvil para buscar en su giro la dirección del viento, desplazándose mediante una gran viga de madera llamada guía.
.-La maquinaria, compuesta por una rueda vertical que trasforma en energía eólica el viento que recogen las velas triangulares, se incardina en otra, la linterna, que a su vez la trasmite al conjunto de las dos piedras de moler: una fija abajo, la solera, y otra arriba móvil, la volandera. El mal estado de conservación actual de los molinos--apenas dos conservan parte de la maquinaria y el chapitel, mientras que del resto sólo queda en pie la torre--se debe al total abandono de sus funciones, pues ninguno ha conservado su utilidad más allá de mediados del siglo XX. El interés en la restauración y consolidación de los molinos de viento del Cabo de Gata-Níjar radica no sólo en que conforman el mayor conjunto de molinos de viento de Andalucía, sino también en el hecho de que son además, por su especial ubicación, marcadores del paisaje e identificadores de territorios.
Molino de viento en el Cerro del Ave María.
.-Fotografías: Grupo de Senderismo del barrio de Vistahermosa-Buenaventura.
2 comentarios:
El molino del Pozo de los Frailes... menudo morro en la época y casi en esta también... los susodichos se hicieron dueños del único del lugar y cobraban a todo aquel que quisiera agua...
Me lo contó un lugareño muy mayor cuando anduve por aquellos lares.
Disculpas... el molino no, la noria del pozo... hablamos de agua... no de harinas.
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