Solo roquedos tristes,
desnudos como calaveras,
y acebuches, enebros, tojos, cabrahígos,
¡acres como llagas de boca enferma!
Guerra Junqueiro
.-Un viaje a los orígenes, a la esencia de la cultura tradicional y los elementos etnográficos característicos del oeste zamorano, todo ello, acompañado por los siempre impresionantes cañones que acogen al Duero fronterizo entre España y Portugal. Ésta ha sido la magnífica actividad que el Grupo Senderismo Vistahermosa ha podido disfrutar hoy domingo, 7 de Octubre de 2012 en el Parque Natural Arribes del Duero (Zamora). Pasemos pues, a relatar la jornada vivida, muy intensa y muy instructiva.
.-Eran las 9:30h cuando un nutrido grupo de senderistas han partido de la Pista Polideportiva del barrio de Vistahermosa rumbo a la localidad donde se inicia esta ruta--Torregamones (Zamora)-- y que discurre íntegramente por el sendero de largo recorrido GR-14 Sendero del Duero, perfectamente señalizado con balizas rojo y blancas. Parte el sendero de la trasera de la iglesia de la localidad, por el denominado camino de las Azuzeras, el cual y tras poco tiempo de marcha nos permite contemplar una hermosa fuente de factura romana.
.-Eran las 9:30h cuando un nutrido grupo de senderistas han partido de la Pista Polideportiva del barrio de Vistahermosa rumbo a la localidad donde se inicia esta ruta--Torregamones (Zamora)-- y que discurre íntegramente por el sendero de largo recorrido GR-14 Sendero del Duero, perfectamente señalizado con balizas rojo y blancas. Parte el sendero de la trasera de la iglesia de la localidad, por el denominado camino de las Azuzeras, el cual y tras poco tiempo de marcha nos permite contemplar una hermosa fuente de factura romana.
Panel indicativo en el inicio de ruta.
.-No tardaremos mucho tiempo en atravesar, caminando por una cómoda pista, una zona húmeda y lindante a uno de los muchos arroyos que son aprovechado en esta zona: el arroyo Mimbrero, jalonado de multitud de molinos y manaderos de agua que han sido acertadamente restaurados para el disfrute del senderista. Como auténticos monumentos etnográficos, los molinos forman parte del pasado histórico, cultural y social de la zona, muy arraigado en este rincón de la comarca. El caminante se podrá deleitar con los molinos de Matarranas, las Forcas o el manadero de La Gloria, donde es posible contemplar los azudes, desvíos y canalizaciones de agua, ruedas molineras, engranajes, ejes y todo el instrumental vinculado al uso de estos elementos.
El molino nuevo.
.-Camino adelante y tras una hora y media de cómodo y agradable paseo, llegamos a un desvío en el camino del GR-14, que perfectamente señalizado y hacia la izquierda, nos llevará a un impresionante monumento etnográfico y esencia pura de la vida pastorial de la zona: los Chiviteros de Torregamones. Es este lugar un auténtico homenaje a las generaciones pasadas, a las tradiciones costumbristas, a la subsistencia y a la protección del ganado recién nacido de dos emblemas de la comarca: el zorro y el lobo. Como si de "hoteles para cabritos" se tratase, el conjunto te transporta en el tiempo, te lleva a disfrutar con el uso de los elementos de la tierra, granito y escobas, con el objetivo de crear una auténtico poblado donde conviven en perfecta simbiosis el hombre y el ganado. Un lujo,..... algo ierrepetible,.......digno de visitar.
Chiviteros de Torregamones.
.-Retornamos sobre nuestros pasos pero no sin antes, porner en marcha el GPS, pues esta vez teníamos claro que el Geocache de la Peña o Bolo de la Torta no se nos podía escapar. Y ahí estuvieron los más pequeños del grupo....avispados y emocionados con la búsqueda que este tipo de juegos, convierte en más amenas si cabe, las incursiones en la naturaleza. Y allí estaba....escondido en un pequeño buraco de la dura roca granítica. Firma en el libro de registro, depósito de uno de los recuerdos del grupo que lo ha "cazao" y retorno al sendero oficial para seguir con el desarrollo de la jornada, pero no sin antes disfrutar de las primeras e impresionantes vistas sobre Arribes del Duero y de encontrarnos una suculenta sandía, que de forma solitaria, era la única protagonista de un planta nacida a los pies del abismo.
El geocache de la Peña de la Torta.
.-Volvemos al sendero y tras llegar a una cancela metálica con unas banderolas indicativas, alcanzamos una vaguada donde se encuentra un bonito puente de piedra y los restos de un molino. Continuamos subiendo con la vista al fondo de un magnífico promontorio hasta alcanzar dicho punto, que es donde se encuentra un conjunto arqueológico y un pasado de sumo interés. En este lugar se hallan los restos de un castro conocido como San Amede o San Mamed, que deriva de una ermita construida hacia finales de la Edad Media y que se mantuvo en pie hasta el siglo XIX, erigida en honor a San Mamés, santo cuya devoción trajeron peregrinos del Camino de Santiago. En su construcción se utilizaron materiales procedentes del castro, de los que se han recuperado entre otros, algunos de la Segunda Edad del Hierro. Es posible contemplar los restos de la planta, el inicio de las arcadas, el altar y la puerta de entrada..........en definitiva, una reliquia de la cristianización.
Restos de la Ermita de San Amede.
.-El sendero continua en un sube y baja hasta otro punto de interés: los restos del Castro de Peña Redonda, que según algunos autores fue un poblado vetón, posteriormente romanizado. Los pobladores lo utilizan como mirador de los arribes, resultando magníficas las vistas desde este lugar. La peña o roca a la que hace alusión la denominación, lleva ubicada sobre una montaña durante milenios y aparenta estar haciendo equilibrio. Es posible observar en el entorno de dicha peña, cazoletas labradas en la roca, cuyo destino bien pudo ser el de moler grano o incluso oro, pues muy impostantes han sido los hallazgos y los estudios realizados sobre la minería en toda esta zona. Fotos de rigor en este lugar, magnífico destino de pobladores de otros tiempos, atalaya sobre el infinito y mirador excepcional de Arribes del Duero.
Desde Peña Redonda, las vistas son impresionantes.
.-Camino adelante continuamos en suave descenso hasta una nueva bifurcación en el sendero. De frente parte un sendero local, denominado Peña Redonda, a la izquierda un pequeño sendero local denominado Los Molinos y a la derecha continúa nuestro sendero, el GR-14 Sendero del Duero y que nos llevaría, no sin antes recorrer el de los Molinos, hasta el final de nuestra ruta. Lo dicho,....... había ganas de seguir disfrutando y en dicho desvío, algunos senderistas no quisieron perderse el completísimo conjunto molinero y mirador de la Ribera del Pontón, que a lo largo de 650m, aprovecha el agua de dicho arroyo en un sin fín de azudes, desvíos y canalizaciones para el agua, previas a su destino final en el padre Duero.
Conjunto etnográfico de los Molinos del Pontón.
.-Retornando sobre nuestros pasos, llegamos al desvío antes señalado y continuamos por el GR-14 en dirección a la localidad final de ruta: Villardiegua de la Ribera. Dejando a un lado un viejo molino, el sendero llega al conjunto minero de Valle o Rivera del Pontón, donde se pueden observar las cazoletas, unos agujeros en las rocas donde ya en la época de la dominación romana, se trituraba y lavaba la roca para buscar oro. Ahora vamos por una vereda junto al lecho del arroyo y podemos ver puentes tradicionales de piedra que se que se construyeron para poder cruzar el río. El arroyo del Pontón acompaña al sendero en este tramo y a sus orillas se asientan, antiguos molinos de agua, hoy en desuso. Durante los meses de verano el arroyo permanece seco, pero en época de lluvias el agua corre por el fondo de la vaguada, creando verdes pastos en sus orillas.
Cazoletas para la molienda del mineral.
.-Las encinas de buen porte dominan en paisaje, es el paraje de la Escornea y por el llamado el camino del Picón, una amplia pista de zahorra natural llega a Villardiegua de la Ribera, un lugar atractivo lleno de historia, construcciones y casas con la más genuína arquitectura tradicional. En la plaza principal podemos observar un ídolo de tiempos de los vetones, se trata de una mula que más que mula, tiene forma de un toro, y que se ubica cerca a la iglesia parroquial de la localidad. Aquí nos disponemos a montar en nuestros coches, llevar a algunos compañeros a Torregamones a recoger los suyos y tras un temtempié con charla animada, dar por finalizada esta magnífica marcha de 19 km de recorrido y 7 horas de duración que como siempre, recomendamos a todos aquellos que alguna vez, se dejen caer por este rincón del oeste zamorano.
Para finalizar, una buena mojadura con agua de la fuente.
.-Un buen reportaje en:
.-Para más información sobre la ruta (distancias, perfiles,.....) aquí te puedes descargar el track:
.-El registro del geocaching por los más jóvencitos y jovencitas del grupo:
.-Una fotografía aérea de la ruta:
GR-14 Torregamones-Villardiegua.
.-Este mapa topográfico te será muy útil:
Mapa topográfico GR-14 Torregamones-Villardiegua.
.-Fuente y fotografías: Grupo Senderismo Vistahermosa.
1 comentario:
.-Que el paisaje que te vas a encontrar en Arribes del Duero es impresionante.....está fuera de toda duda, pero en mi opinión, ésta ha sido una de las marchas más completas de las que hemos realizado por este Parque Natural. Caminar entre cortinas, pontones, porteras, molinos y manaderos, es caminar por etnografía y las costumbres populares de la zona. Si a todo eso se le añade el rico patrimonio que supone la cultura castreña, la romanización y dominación del territorio como fuente de riqueza mineral y la posterior ciristianización en forma de restos de ermitas en lugares privilegiados, el menú no puede ser más suculento. Sencillamente genial.....y además, con tesoro incluído....que se lo digan a los ´jovencitos del grupo.
P.D. ......por cierto, que hago con la sandía?
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