lunes, 13 de febrero de 2012

VILVESTRE-EMBARCADERO DE LA BARCA POR EL MONTEGUDÍN. PARQUE NATURAL ARRIBES DEL DUERO (SALAMANCA)

Ponle los esquilones
a los "bues" negros
pa que saquen el carro
de aquellos cerros.

D. Miguel de Unamuno y Jugo

.-Es asombroso como unas condiciones climatológicas totalmente diferentes, pueden ofrecer al caminante puntos de vista contrapuestos en torno a la misma ruta senderista. Algo así es lo que hemos podido experimentar el pasado Domingo 12 de Febrero de 2012, donde, como si de un retorno se tratase, hemos vuelto a caminar por una paraje deseado, el Parque Natural de Arribes del Duero (Salamanca), dentro del término municipal de Vilvestre. Una magnífica marcha que a lo largo de 17 km de recorrido nos ha internado en uno de los más bellos parajes de este espacio natural: Montegudín, magnífico pastizal, sabinar, encinar y alcornocal, que decora las lomas entre las que se encajona el padre Duero en su camino hacia tierras portuguesas. Pasemos pues y como siempre, a relatar el desarrollo de la jornada:

.-Eran la 9:30h del día anteriormente citado, cuando con un cielo totalmente despejado y una helada de las que caen en Vistahermosa, tomamos rumbo al punto de inicio de la ruta del día, la localidad arribeña de Vilvestre. En la plaza del crucero nos esperaban compañeros de otras localidades salmantinas que suelen participar en las marchas y después de la fotografía de rigor, mochila al hombro y a caminar que se ha dicho. Abandonamos el núcleo urbano en sentido noroeste en busca de un altozano desde el que se divisa al sur la mole rocosa de Penedo Durao (Portugal) y la Peña de la Vela (España), miradores ambos del literario Duero que hace aquí de frontera natural.

La bienvenida, como mandan los cánones.

.-El camino es una pista ancha y cómoda pero que requiere especial atenciaón para tomar el desvío adecuado a la izquierda y que nos llevará ya por senda y trocha ganadera al Molino de la Luisa. A lo largo del camino nos encontraremos con un abrevadero para ganado a nuestra izquierda, una portera de piedra hecha con manos de artista y un primer desvío a la izquierda señalizado con un prohibido el paso a vehículos que no debemos tomar. Siguiendo camino adelante nos volvemos a encontrar con un segundo desvío a la izquierda señalizado con otro prohibido el paso a vehículos a motor; éste es el que debemos tomar, descendiendo rápidamente y estando muy atentos a la señalización amarillo-blanca que durante el camino encontraremos.

¡Que manos!......tienen los de arribes.

.-Rápidamente y a través de una trocha empedrada, llegamos a uno de los elementos etnográficos más representativos de la ruta y que ha sido restaurado con gran acierto para el disfrute de los visitantes: el Molino de la Luisa, reflejo de la cultura tradicional y las labores agrícolas de estas tierra, en torno a los arroyos que jalonan la zona. Cruzamos el puente y siempre atentos a la señalización nos dirigimos a nuestro segundo objetivo del día: los pastizales comunales del Montegudín. El camino es una auténtica delicia, un paisaje adehesado en plena planicie arribeña. No tardaremos en encontar una bifurcación en el camino, la cual debemos ignorar y seguir en línea recta hacia el promontorio que de frente anuncia la presencia del Picón.

Panorámica de El Picón.

.-Como si de un vergel se tratase, el camino se interna en la magnífica espesura boscosa que por estas fechas ya va mostrando el paisaje, el cual desemboca en una magnífica meseta a los pies de la Casa del Picón. No se lo pensaron dos veces.....algunos senderistas cual ardillas trepadoras, ascendieron hasta lo alto del promontorio, en busca del vértice geodésico que sirve como referencia en los mapas....y la subida compensó, pues las vistas son de cine, de las buenas, dominadoras, como aves que surcan el cielo en este Espacio Natural salmantino.

Cabañas ganaderas "Las Tenadas", balcón al Duero.

.-Descenso calmado y vuelta a subir para alcanzar las cabañas ganaderas de las Tenadas, donde un nutrido grupo de vacas nos dió la bienvenida y nos abrió paso al magnífico balcón que representa este lugar. Desde aquí se puede observar el Duero en todo su esplendor, amplio, quieto, elegante e integrador. La senda se estrecha y en algunos tramos incluso desaparece, pero es lo de menos, lo importante es mirar, sentir tocar, algo de lo que no pudimos disfrutar en el anterior intento y que hoy nos hemos desquitado. Un viaje al lado del rio de Castilla en su discurrir hacia las aguas de atlántico, fronterizo entre los dos paises que conforman la Península Ibérica.

No sabes dónde mirar.....¡impresionante!.

.-Después de deleitarnos continuamente con unas vistas de vértigo e impresionantes hacia los cortados y cañones del Duero, nos disponemos a saciar nuestro hambre con una suculenta comida en los prados y pastizales que conforman este paisaje, eso sí, acompañados ya y de frente, por las magníficas vistas que hacia el embarcadero de La Barca se divisan. Y que les vamos a contar.....si el ritual ya es más que famoso, con postres incluídos de los que daremos buena cuenta en este este espacio virtual.Es en estos pastizales donde debemos estar especialmente atentos ya que la senda que aparentemente desaparece, vuleve a continuar a nuestra izquierda, mirando de frente al embarcadero.

Magníficas vistas al embarcadero de La Barca.

.-Senda adelante continuamos ya encontinuo descenso para salir en poco tiempo a la carretera de La Barca y dar por finalizada en éste lugar, como si de viajeros esperando el barco a punto de navegar, se tratase. En definitiva, esa espinita clavada que una vez no pudo ser, pero que por fin se ejecutó, en este bello paraje del oeste salmantino que recomendamos como siempre, a todos aquellos que quieran perderse por este agreste y singular paisaje.

¡¡Viajeros al barco.....a punto de zarpar!!.


.-Aquí podrás disfrutar de una amplia galería fotográfica:



.-Esta fotografía aérea de la ruta, te será muy útil:

Ruta Vilvestre-La Barca por Montegudín

.-Este mapa topográfico te será muy útil:

Mapa Topográfico Vilvestre- La Barca por Montegudín.


.-Fuente y fotografías: Grupo de senderismo del barrio de Vistahermosa-Buenaventura.

1 comentario:

Mercedes dijo...

Pues sí, nos quitamos la espinita... y qué lujo de paisaje... y el solito... Nos faltó un paseo por el Duero desde La Barca...